sábado, 27 de abril de 2013

¡AMAOS!



En este quinto domingo de Pascua, la invitación que Jesús nos hace en el evangelio es radical y comprometida: “Que como yo os he amado, así también os améis unos a otros”.
Nos encontramos en el contexto de la última cena; Jesús se despide de sus discípulas y les transmite, a lo largo de un discurso íntimo y entrañable, sus últimas recomendaciones, sus últimos deseos, que se dirigen también a cada uno de nosotros, como seguidores suyos. Los discípulos de Jesús nos podríamos distinguir por muchas cosas, pero Él quiere precisamente que nos distingamos por una actitud muy concreta que, más que actitud, es todo un estilo de vida: AMAR. “En esto reconocerán todos que sois mis discípulos, en que os amáis unos a otros”. No nos debemos distinguir por una forma de vestir, por una ideología, por unas normas o por un comportamiento determinado, nuestro distintivo ha de ser el amor y esto nos tiene que identificar como seguidores de Jesús. Un estilo de vida que, ciertamente, no es fácil y que pide mucha entrega, dedicación, paciencia, sencillez, alegría... pero, intentando vivir este “mandamiento nuevo” también nuestra vida será nueva.
Que este tiempo de Pascua que estamos viviendo nos ayude a hacer crecer mucho más nuestro amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario