Hoy, día 17 de septiembre, clarisas y franciscanos celebramos la fiesta de la impresión de los estigmas de san Francisco. El año 1224, Francisco, que a lo largo de su vida siempre había vivido el evangelio con toda radicalidad y siempre se había identificado con la persona de Jesucristo, se retiró unos días, en un clima de silencio y de oración, en una montaña alta y escarpada de Italia llamada Alverna. Allí, el día 14 de septiembre, Dios le hizo el don de marcar en sus manos y pies las mismas heridas de Jesús en la cruz, así como también la herida del costado derecho ocasionada por la lanzada.
Des de entonces, Francisco llevó en su cuerpo estas marcas, de las cuales brotaba frecuentemente sangre. Al cabo de dos años, en 1226, Francisco moría. Se había identificado tanto con Jesús a lo largo de su vida y había vivido asemejándose tanto a Él que incluso se le asemejó exteriormente.
Des de entonces, Francisco llevó en su cuerpo estas marcas, de las cuales brotaba frecuentemente sangre. Al cabo de dos años, en 1226, Francisco moría. Se había identificado tanto con Jesús a lo largo de su vida y había vivido asemejándose tanto a Él que incluso se le asemejó exteriormente.
Esta es la fiesta que hoy celebramos, con el ánimo de que el ejemplo de Francisco nos ayude a vivir a nosotras identificadas cada vez más con Jesucristo.
¿Quién como este santo?. Sólo su oración y amor a Dios y a sus hermanos los humanos y la creación, pudo hacer de él un santazo.
ResponderEliminarOjalá pudieramos marcarnos por el amor de Cristo y plasmarlo en el prójimo.
Adelante hermanas
Si Francisco pudo hacerlo, nosotros también podemos hacerlo. Francisco fue un gran amador del Cristo pobre y Crucificado, gracias a este amor y confiaza en Él, pudo hacer lo que hizo. Oremos más y aumentará más nuestra fe, recordad que la fe en Nuestro señor,lo puede todo.
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