
Un año más nos volvemos a encontrar en las puertas de la Cuaresma. Un camino de cuarenta días que la Iglesia nos invita a recorrer para poder llegar con ilusión y con compromiso renovado a la gozosa celebración de la Pascua.
El miércoles de ceniza es la puerta que nos introduce en este recorrido.
A lo largo de estas semanas somos invitados a profundizar, por medio de los textos de la liturgia, en nuestro bautismo, en nuestra condición de hijos y de hijas del Padre. Los textos del evangelio de cada domingo nos irán presentando a la persona de Jesucristo, siempre fiel al Padre, caminando hacia la Cruz y la Resurrección.
Este próximo domingo, el primero de la Cuaresma, Jesús mismo nos dirá: “Convertíos”, como una invitación a dirigir y a enfocar nuestra vida hacia Dios y hacia los hermanos, poniendo nuestra mirada en él mismo, que vivió con plenitud y con alegría su incondicional entrega.
Que este tiempo de Cuaresma nos ayude también a nosotros a profundizar en nuestro seguimiento y en nuestro compromiso como creyentes. ¡Recorramos este camino con alegría!